Contrato de UTE: sus 10 elementos fundamentales
Las Uniones Temporales de Empresas (UTE) son esenciales para participar en licitaciones públicas de gran envergadura. Un contrato de UTE es un acuerdo legal entre varias empresas que se unen temporalmente para colaborar en la ejecución de un proyecto común, generalmente en el ámbito de las licitaciones públicas. Este contrato establece las responsabilidades, aportaciones y beneficios de cada miembro, así como la estructura de funcionamiento interno de la UTE, garantizando la correcta gestión y cumplimiento de los compromisos adquiridos en el proyecto.
En este artículo, te mostramos los elementos clave que debe incluir un contrato de UTE, desde la constitución y participación hasta la confidencialidad y resolución de conflictos. ¡Descubre cómo estructurar tu contrato para ganar más licitaciones!
Objeto de un contrato de UTE
El primer y más importante aspecto de un contrato de UTE es definir su objeto. Este debe establecer que las empresas involucradas acuerdan participar conjuntamente en una licitación pública y comprometerse a la constitución formal de la UTE si resultan adjudicatarias. La colaboración está centrada en un objetivo común, un proyecto que debe estar descrito, aunque sea brevemente, así como la denominación de la licitación a la que se concurre, en el contrato de UTE.
Porcentaje de participación en la UTE
El porcentaje de participación de cada empresa en la UTE es fundamental. Este reparto define la responsabilidad, derechos y beneficios que recibirá cada miembro. El contrato debe especificar estos porcentajes de manera clara.
Por ejemplo:
- Empresa A: 55%
- Empresa B: 40%
- Empresa C: 5%
En el supuesto de que cada empresa se vaya a encargar de la ejecución de una parte o prestación concreta del contrato, debe delimitarse el alcance y responsabilidad de la parte del proyecto que assume.
Preparación y presentación de la oferta
Debe establecerse que, durante la fase de licitación, cada empresa que forma parte de la UTE debe colaborar estrechamente para preparar la oferta. Esto incluye la recopilación de documentación técnica y financiera, la realización de estudios de precios, y la creación de un plan de negocio conjunto. Además, cada empresa involucrada debe cubrir los costes de preparación de la oferta en proporción a su participación en la UTE.
El conveniente que el contrato también establezca un compromiso de exclusividad: ninguna de las empresas presentará ofertas independientes ni se asociará con terceros fuera de la UTE, para evitar conflictos de interés y asegurar la cooperación y el éxito.
Órganos de gestión y administración de la UTE
Para la gestión, dirección y representación de la UTE, puede establecerse el nombramiento de un gerente único, responsable de la ejecución del proyecto, nombrado por los miembros de la UTE, con poder para tomar todas las decisiones. Su cargo, puede ser remunerado, si así lo establecen las empresas que conforman la UTE.
En proyectos de mayor envergadura, es recomendable el establecimiento de un comité de gerencia, órgano formado por representantes de cada empresa y que será el responsable de la administración y supervisión del proyecto. Sus decisiones deben acordarse por unanimidad, pudiendo, tal y como se comentará posteriormente en el Apartado de resolucion de conflictos, establecerse un mecanismo para la toma de decisiones, en el supuesto concreto de no alcanzar dicha unanimidad.
En el supuesto de establecerse un Comité de Gerencia, el gerente único se encargará de ejecutar las decisiones alcanzadas en dicho organismo.
La administración de la UTE es un aspecto crucial para asegurar una correcta gestión del proyecto. Generalmente, una de las empresas miembro se encarga de la gestión administrativa, fiscal y contable de la UTE, sin recibir retribución por estas funciones. La administración puede ser llevada a cabo por personal propio de la empresa designada.
En cuanto a la dirección técnica, esta se divide según los trabajos específicos de cada empresa dentro de la UTE. Cada empresa es responsable de la ejecución de sus tareas, bajo las directrices del Gerente y el Comité de Gerencia (si lo hay), asegurando que todas las actividades del proyecto se realizan de acuerdo a los plazos, normas técnicas y calidad requerida. La coordinación eficiente entre los miembros es clave para el éxito del proyecto y el cumplimiento de las condiciones de la licitación.
Régimen interno de funcionamiento
El régimen interno de la UTE regula cómo se llevarán a cabo las tareas del proyecto, regulando cuestiones tales como:
- Establecer si la UTE contratará directamente personal, o si los recursos humanos serán proporcionados por las empresas miembros, que asumirán la responsabilidad en términos de riesgos laborales.
- Los beneficios o pérdidas se repartirán según los porcentajes de participación establecidos.
- Las finanzas de la UTE se gestionarán de manera independiente, con un sistema contable separado del de las empresas que la componen. Se realizarán balances y cuentas de resultados periódicos para asegurar la transparencia
Este sistema de contabilidad separado e independiente, es de gran importancia, si se quiere inscribir la UTE en el Registro Especial de UTEs y beneficiarse de las ventajas fiscales que implica.
Política de endeudamiento y garantías
Es conveniente establecer como se regular la financiación necesaria para acometer el proyecto, es decir, si la UTE podrá por si misma acudir a financiación externa o bien, que cada miembro deberá obtener los fondos necesarios para cubrir las necesidades económicas, según su porcentaje de participación en la UTE.
Responsabilidad entre las partes
Este es un aspecto de gran importancia puesto que, aunque la responsabilidad de la UTE es solidaria frente a la administración contratante y terceros, es decir, responden por igual sus miembros de manera conjunta e ilimitada, dentro de la unión, cada empresa asume la responsabilidad según sus tareas asignadas y porcentajes de participación.
Subcontratación y exclusividad
El contrato de UTE puede prever la posibilidad de subcontratar parte de los trabajos. Las empresas tienen la facultad de subcontratar las tareas asignadas, pero siempre bajo el marco de responsabilidad solidaria frente al resto de la UTE y cumpliendo con los términos de la licitación, principalmente, si permite la subcontratación de ciertos trabajos.
En caso de pretender acudir a la subcontratación, es necesario fijar en el contrato unas condiciones de exclusividad, en el sentido de que las partes se comprometan a negociar con terceros que puedan competir en la licitación o afectar el proyecto en curso.
Resolución de conflictos
Finalmente, el contrato debe prever mecanismos para la resolución de conflictos. En caso de que las partes no lleguen a un acuerdo a través del Comité de Gerencia (en el supuesto de que se haya creado tal figura), se puede recurrir a un experto independiente o someter el conflicto de las partes a arbitraje y, finalmente, si no se ha podido resolver de otra manera, a los tribunales competentes.
Somos especialistas en Asesoramiento a UTE
Con estos elementos fundamentales, un contrato de Unión Temporal de Empresas (UTE) establece una estructura clara para que varias empresas colaboren eficazmente en proyectos de licitación pública. Al abordar todos estos aspectos, desde el reparto de participación y responsabilidades hasta la confidencialidad y resolución de conflictos, se garantiza una gestión sólida y transparente del proyecto.
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